Samuel L. Jackson es toda una celebridad. Es el segundo actor más taquillero del cine y además tiene el récord de más participaciones en películas, sumando más de 120 hasta ahora.
Como toda una estrella, el actor hace algunas exigencias a la hora de firmar un contrato y una de ellas es elegir sus pelucas, si el filme lo amerita, a propósito de que está calvo.
“Cuando empecé a perder mi cabello fue durante la época en que todo el mundo tenía un montón de pelo. Sentí este gran agujero en medio de mi afro, nunca usé un peine, así que tuve que calcular rápidamente cuál era el corte de pelo para mí, y el mejor era en el que no tenía pelo”, confesó el estadounidense.
Un príncipe en Nueva York fue una de las primeras películas en las que apareció Jackson en 1988. En este film hizo de extra y se le pudo apreciar con bastante pelo. Sin embargo, con el paso de los años y de su carrera, fue perdiendo su frondosa cabellera debido a una calvicie genética.
Su primer papel calvo fue en The Great White Hype, una película de comedia de deportes estadounidense, dirigida por Reginald Hudlin en 1996.
A propósito de la alopecia de Jackson hay una anécdota y es que el papel de Jules Winnfield que interpretó en Pulp Fiction (Tiempos violentos), estaba imaginado con un look muy distinto al que finalmente se vio en el cine.
Esos rizos engominados que lució Jackson eran un peinado muy popular en las décadas de 1970 y 1980 entre la comunidad afroamericana, se les conocían como jheri curl. Para el momento, Jackson ya estaba perdiendo cabello y se requería una peluca para interpretar el personaje que Quentin Tarantino, director del filme, había imaginado.
Jules Winnfield estaba ideado con una frondosa cabellera afro, por lo que el asistente de producción de Tarantino fue a comprar una peluca; sin embargo, regresó de la tienda con la cabellera postiza errónea al confundir el peinado jheri curl con el afro.
Lo cierto es que aquellos rulos que lució Jackson en pantalla fueron producto de una equivocación; no obstante, el look le dio un toque particular al actor estadounidense, quien en 1995 fue nominado al premio Oscar como mejor actor de reparto por esta interpretación y ese mismo año ganó el premio BAFTA.