El empresario Scott Disick -de 35 años- se ha caracterizado por ser el centro de la controversia, y en ocasiones, un fuerte malestar para el clan Kardashian-Jenner por su cuestionable comportamiento público, sabiendo que no logra controlar su ira o el consumo de alcohol.
Con sus altas y bajas, Disick permaneció junto a la socialité Kourtney Kardashian por casi una década, con quien tuvo tres hermosos hijos: Mason, Penelope y Reign.
Su eterno y complicado noviazgo fue tema recurrente del reality TV, Keeping Up With The Kardashians, debido a que casi todas las semanas tenían más y más peleas, que los llevó a distanciarse.
La incompatibilidad de caracteres obligó a que tomaran caminos distintos, aunque siguen criando a sus hijos como si nada hubiese pasado.
Desde su rompimiento vimos al autonombrado Lord con hermosas modelos estadounidenses, mientras Kourtney continuó enfocada en su rol de madre hasta que conoció al joven modelo Younes Bendjima.
Él sacó lo mejor de la morocha, y le demostró que podía darse una segunda oportunidad sin remordimientos. En tanto Scott, siguió acaparando las portadas de los tabloides por su rara e inadecuada conducta. ¿Querés saber cuáles son los momentos más extravagantes de Disick? Los tenemos acá:
Dosis peligrosas
Durante su cumpleaños número 31 llevó las cosas muy lejos. Armó una fiesta en los Hamptons con varios de sus amigos, pero Kourtney debió regresar a Los Ángeles para la celebración de North, la hija de Kim.
Scott se pasó de tragos, al punto que uno de los guardias de seguridad lo dejó en su cama para que durmiera. Al despertar, se fue a un club nocturno. De regreso a casa optó por tomarse un frasco de pastillas para dormir. Sus acciones lo obligaron a acudir a rehabilitación.
Mala educación
En el año 2010 dejó al público conmocionado por pelear con un camarero en un restaurante. Durante la discusión verbal le metió en la boca un billete de 100 dólares, lo que fue intolerable.
Todo ocurrió en la cena de celebración del cumpleaños de Kim, y el incidente terminó por arruinar la velada para todos los asistentes.
Problemas de ira
Para la temporada 2 del spin off Kourtney y Khloé Take Miami, Scott se molestó con su chica que lo confrontó por haber asistido a una fiesta sin medir las consecuencias. ¿El resultado? Golpeó con su mano el espejo del baño, cortándose la piel, todo esto mientras el pequeño Mason trataba de dormir en la habitación de al lado.
Paparazzi
Con el tiempo se ha acostumbrado a que lo sigan los medios de prensa, pero antes detestaba tener cerca un paparazzi. Nadie puede olvidar su horrible ataque de ira en el 2011, cuando un fotógrafo se puso cerca de él y Mason en el aeropuerto. Hubo cargos por agresión, que se resolvieron a puertas cerradas.
Amistad tóxica
Uno de sus momentos alocados fue junto a su ex cuñado Rob Kardashian, en una visita a South Hampton. A eso de las 3 de la mañana, decidieron hacer ruido hasta que Bruce Jenner (Ahora Caitlyn Jenner) les reclamó sus acciones.
“Esta no es una casa de fiestas. Kendall y Kylie están durmiendo, estoy durmiendo, tu madre está durmiendo y ¡estás aquí actuando como niños de dos años!”, fueron las palabras del ex esposo de Kris Jenner.
También con Rob destrozó habitaciones de hotel, y pagó exorbitantes cuentas por consumo de alcohol de hasta más de 1800 dólares.