Bob Kendal, de 45 años, conducía por Mallerstang, en el este de Cumbria (Inglaterra), cuando vio por el rabillo del ojo una cascada, pero el agua iba en dirección contraria.
Tras una inspección más detallada, se trataba de una cascada que se movía en dirección contraria, gracias a los fuertes vientos causados por la tormenta Dudley, que sacudió el Reino Unido con potentes ráfagas de viento el 17 de febrero de 2022.
"Al principio pensé que era humo que se elevaba, pero es una zona bastante desierta, así que no debería haber humo", explicó Bob