Diane Keaton se mantiene como una de las leyendas de Hollywood más respetadas de nuestros tiempos. Su primera película importante fue El Padrino (1972), pero al inicio de su carrera llegaron films como Play It Again, Sam (1972), Sleeper (1973) y otros trabajos junto al cineasta Woody Allen.
En la actualidad, Keaton maneja oficios relacionados a la fotografía, la escritura, la dirección cinematográfica, aunque quizás su rol más importante viniera a sus cincuenta años: el ser madre de dos nenes.
Keaton cautivó a populares galanes de la pantalla como Warren Betty y Al Pacino, sólo que nunca logró continuar con alguien al punto de comprometerse a matrimonio. Con el paso de los años, entendió que si quería ser madre, lo haría por cuenta propia.
En el 1996 Diane adoptó a su primera hija, Dexter Keaton, quien nació un año antes. A una fuente cercana confesó que ser mamá la transformó. En aquella ocasión no lo consideró, ahora opina que sus hijos seguirán creciendo sin un padre a su lado, mientras que pronto ella necesitará de ayuda al entrar a una edad más avanzada.
“Siento que la maternidad es la experiencia más completa de humildad que haya tenido, y no lo cambiaría por nada más en el mundo”, destacó la protagonista de Annie Hall (1977).
Su segundo hijo fue Duke, quien nació en el 2000. Al recibirlo con los brazos abiertos, Diane supo que el chico mostraba problemas de confianza, evitando tener alguna intimidad familiar en casa.
“Con mis hijos no soy tan estricta, siempre trato de que vean mi mejor cara. Yo disfruto tenerlos cerca y los amo incondicionalmente”, expresó.
Keaton perdió a su padre Jack en 1990, así que nunca llegó a ver a sus nietos, a diferencia de su madre Dorothy que estuvo con ellos por pocos años hasta su triste partida en septiembre del 2008.