Shalaco Wordsmith y su compañero Phoenix oyeron hablar de una cueva bajo un árbol durante su viaje a Hawaii, Estados Unidos.
Los amigos, aventureros por naturaleza, encontraron la cueva en las raíces de un árbol.
Tras descender a la oscuridad, encontraron una serie de túneles y pasillos ramificados. "La cueva desprendía un misterio que evocaba una gran sensación de emoción y peligro", explicaron.
Shalaco exploró la boca de la cueva antes de dar la vuelta y regresar a la superficie. Los intrépidos amigos no dudaron en grabar la aventura y publicarla en sus redes sociales.