Paul McCartney pidió justicia para la familia de George Floyd y para todos aquellos que murieron y sufrieron por la brutalidad policial. "Es necesario escuchar más, hablar más, educarse y tomar acción", sostuvo. Además, recordó cuando Los Beatles cancelaron un concierto en Estados Unidos por la segregación racial.
A través de las redes sociales, McCartney se pronunció a favor de las protestas surgidas como consecuencia del asesinato del policía a manos del racismo policial y expresó: "Apoyamos a todos los que protestan y elevan sus voces en este momento. Quiero justicia para la familia de George Floyd, quiero justicia para todos los que murieron y sufrieron. No decir nada no es una opción".
El artista, que lleva una militancia activa contra el racismo, recordó -en el mismo descargo- el show que Los Beatles decidieron cancelar en Jacksonville (Luisiana, Estados Unidos) en 1964, debido a la segregación racial de la organización respecto del público. En aquel entonces, los cuatro grandes de Liverpool se negaron a cantar bajo esas condiciones: "Nos pareció mal, así que dijimos 'no vamos a hacer esto'. Y el concierto que sí dimos fue el primero sin una audiencia segregada. Luego nos aseguramos de que esto estuviera en nuestro contrato. Nos parecía de sentido común", relató.
"Me siento enfermo y enojado porque pasaron 60 años de ello y el mundo está en shock por las horribles escenas del asesinato sin sentido de George Floyd a manos del racismo policial, junto con otros innumerables que ocurrieron antes", cerró el compositor.
Fuente: TÉLAM.