Por compromisos laborales, Hernán Piquín decidió dar un paso al costado del Súper Bailando y despedirse de las increíbles coreografías que presentaba junto a Macarena Rinaldi en la pista, con las que deslumbrada al público.
Y pese a que le esperan grandes desafíos en España, el bailarín se sinceró a horas de presentar su última performance en el ritmo videoclip: "La verdad es que no estoy contento, ni feliz de irme. Podría haber seguido hasta mediados de noviembre, pero tampoco me parecía justo para el resto de los participantes que me pongan un reemplazo y que yo vuelva en 15 o 20 días", explicó en Siempre Show (lunes a viernes a las 20 por Ciudad Magazine).
"No me voy contento porque me hubiese gustado muchísimo seguir hasta el final. Cuando doy mi palabra trato de cumplirla y de hecho cuando me llamó la producción a principio de año, le dije que tenía muchos viajes a España. Y ellos me contestaron 'vamos viendo'", agregó.
"No me voy contento porque me hubiese gustado muchísimo seguir hasta el final. Cuando doy mi palabra trato de cumplirla y de hecho cuando me llamó la producción a principio de año, le dije que tenía muchos viajes a España. Y ellos me contestaron 'vamos viendo'".
Además, Piquín dejó en claro que su compromiso con el programa era tal que hasta relegó otras responsabilidades anteriormente asumidas: "De los cinco viajes que tenía, me bajé de tres. Tendría que haber ido a hacer una gira en el verano español para hacer 12 funciones y al final no pude ir porque tenía contrato acá".
"Tengo la ciudadanía española desde que nací. Con mi viejo hemos viajado mucho a España porque él es gallego e íbamos a visitar a la familia, así que es mi segunda Patria. Pero me voy triste porque tengo que dejar el Bailando, a mi equipo, equipo con el que quise estar y no me equivoqué", cerró, a corazón abierto.