Una de las parejas más estables que tiene el ambiente artístico es la de Silvia Kutica (59) y Luis Luque (61). En una entrevista con la revista Pronto, la actriz se refirió a la relación de 25 años con el actor y por qué su amor no necesita de firmas ni de iglesias.
"Aún hoy me sorprende con un ramo de flores. Está en esas pequeñas cosas o me compra un chocolate porque sabe que soy muy golosa. Ojo, yo también soy detallista con él; le preparo alguna comidita especial o le dejo una carta sobre la mesa cuando me voy de casa".
“Alejandra Darín hizo las veces de Celestina. Tenía un hijo chico y estaba reacia a formar una pareja de nuevo. Un día se acercó Alejandra y me dijo ‘Pipo me pidió que te dijera que tiene fines serios con vos’. ¡Me morí de amor!”, recordó.
“Con Pipo llevamos 25 años juntos y sigo tan enamorada de él como el primer día. Me gusta mucho escucharlo porque es una persona muy inteligente, resiste archivos de acá a la China, tiene mucho humor y es un profesional al que admiro profundamente. Es un ser muy sensible, cálido y está atento a los detalles”, aseguró, romántica.
"Hace 10 años mientras charlábamos me tiró ‘¿te querés casar conmigo?’. ¡Me quedé helada! No le pude contestar. Después de un tiempo me recalcó ‘¿te diste cuenta de que nunca respondiste a mi propuesta, no?’".
“Aún hoy me sorprende con un ramo de flores. Cuando estrenamos una obra, cae con una flor para cada una de las actrices. Está en esas pequeñas cosas o me compra un chocolate porque sabe que soy muy golosa. Ojo, yo también soy detallista con él; le preparo alguna comidita especial o le dejo una carta sobre la mesa cuando me voy de casa”, reveló.
Sin embargo, lo más sorprendente fue cuando la actriz de Las Estrellas contó cómo Luis le propuso casamiento… ¡y sigue esperando su respuesta! “Fue hace como 10 años ya. Fue re sencillo, bien a su estilo. No preparó nada en especial, sino que estábamos charlando y en un momento, me tiró ‘¿te querés casar conmigo?’. ¡Me quedé helada! No le pude contestar. Me encantó, pero no lo esperaba. Seguimos charlando como si nada y nunca le contesté. Después de un tiempo me recalcó ‘¿te diste cuenta de que nunca respondiste a mi propuesta, no?’. Y me corrió, me dijo ‘ahora la que va a tener que proponer sos vos, a ver qué te contesto yo’. Pasó el tiempo y todavía no tomé coraje para hacerlo”, contó, divertida.