La nota que brindó Diego Ramos en Intrusos días atrás, donde le confesó a Jorge Rial haber sentido que en el programa se burlaban de él cuando pasaban informes en otro momento de su carrera, dio tela para cortar.
“Hace años que yo vengo a sentarme acá. Antes era impensado porque iba venir después de tomar 20 pastillas de Rivotril y porque tenían un tipo que cuando me pasaban en una nota decía ‘iiii’ (el famoso gritito que popularizó el exlocutor del ciclo)”, había declarado el actor en el estudio de América.
Y agregó: “Eso era un dolor en el pecho porque pensaba ‘¿por qué me burlás?, ¿por qué me hacés un 'iii'?’. Pero no quería generar violencia. Yo también podía venir acá y defenestrar al tipo con la cara, el cuerpo o lo que fuera. ¿Entendés? No tiene nada que ver. Era un tipo de humor que cambió, por suerte. Pero todos tenemos que aprender. En ese momento yo pensaba ‘¿por qué me subestimás?, ¿por qué me desvalorizás por lo que soy?’”.
Indagado por sus declaraciones, Ronnie Arias bancó al galán en diálogo con Por si las moscas, el ciclo radial que se transmite por La Once Diez: “¿Decime cuántos conductores fuera del clóset hay en el prime time de la televisión argentina? Hay uno, en América, que es Luis Novaresio. ¿Y cuántos años hace que él salió del clóset? Hace uno o dos años. Entonces sí, los medios argentinos son bastante homófobos. Mirá lo que hizo Lizy Tagliani para estar en pantalla al mediodía, convirtió su personaje casi en un personaje machista. Tenemos una conductora travesti, increíblemente maravillosa en los medios de Argentina, que creo que vendió un poquito el alma al chiste machista”.
Ronnie Arias: "Hay una cultura de esconder al pu… y hay una cultura de no tener huevos en decir ‘soy homosexual’. No creo que los medios persigan a los gays, sino que no se les da lugar".
“Después tenemos a conductores que no están fuera del clóset y que no tienen por qué estarlo si no quieren. Pero lo que digo es que hay una cultura de esconder al pu… y hay una cultura de no tener huevos en decir ‘soy homosexual’. No creo que los medios persigan a los gays, sino que no se les da lugar. Le falta mucho a la Argentina aunque hemos conseguido mucho", remarcó en su relato.
Y cerró: “En la televisión argentina es difícil entrar a un primer lugar si no estás criado con licuado de banana y clase media. A televisión argentina en la que se llegaba desde abajo cayó hace mucho. Ahora para entrar te preguntan cuántas marcas traes. Todavía falta mucho, pero también avanzamos mucho”.