La mesa del domingo de Almorzando con Mirtha Legrand tuvo a Javier Calamaro como uno de sus invitados, y el cantante le hizo pasar un incómodo y gracioso momento en vivo a la diva. En medio de una charla amena, el hermano de Andrés Calamaro recordó con nostalgia el pasado político de su padre: “Ya que estamos de sobremesa y me tomé tres copas de vino puedo decirlo”.
Instantes más tarde, Mirtha le consultó al músico por la polémica entre Diego Torres y Coti Sorokin por la autoría de Color Esperanza, y el artista advirtió una vez más con una sonrisa pícara en sus ojos: “Ya me tomé unos vinitos, puedo decir la verdad ahora, ja”. Luego, aclaró que es amigo de Coti y se excusó: “Yo no soy ni Torres ni Sorokin, yo soy Calamaro. (…) Diego, no me odies, pero tengo entendido que la canción era de Coti, pero no estaba ahí cuando la compuso”.
"Ya me tomé unos vinitos, puedo decir la verdad ahora, ja. Yo no soy ni Torres ni Sorokin, yo soy Calamaro. (…) Diego, no me odies, pero tengo entendido que la canción era de Coti", dijo el músico sobre la polémica entre sus colegas.
Como el asunto era espinoso, la conductora tuvo piedad y cambió de tema. Sin embargo, Calamaro contraatacó consultándola sobre las copas que tenía frente a ella. “Yo ahora tomo agua, y al lado tengo vino blanco. Pero yo no tomo alcohol, me mojo los labios. Me sirven vino por simpatía”. Entonces, Calamaro propuso un brindis con ironía: “¡Salud! ¿Puedo proponer un brindis? ¿Nos podemos mojar los labios?”.
Al final, Calamaró exhortó al resto de los comensales a sumarse al choque de copas: “¡Beban, amigos! Un placer verlos de vuelta”. Y Mirtha Legrand remató entre risas: “No es fácil entrevistar en vivo”.