El sábado pasado, el cuerpo de Federico Blanco, ganador del reality El Bar TV, fue hallado sin vida, apuñalado en el pecho, en las inmediaciones de la Villa Itatí, en Bernal Oeste. La causa fue caratulada como homicidio y, según le contaron a Clarín fuentes de la investigación, no hay señales de robo. El auto del joven de 37 años apareció abandonado a 300 metros, en la entrada de uno de los pasillos de la villa de emergencia, y no se descarta la hipótesis de un ajuste de cuentas por tema de drogas, tal como informó la periodista especializada en policiales Liliana Caruso.
Intrusos habló con Melina, la exmujer de Blanco, con quien fue madre de Santiago (13). “Estamos todos mal, toda la familia. Yo siempre lo quise con toda mi alma. Teníamos una súper buena relación, Fede fue un padre divino con él. Vivió 6 años con él en Bahía Blanca y era un dulce, era divino”, comenzó la mujer, y se refirió a los problemas de adicción de su expareja. “Fede se internó porque quería salir adelante por su hijo que era lo que más amaba en su vida. La mamá de Fede, Anita, es de fierro, siempre estuvo al lado de él, lo bancó en todo. Igual que su hermano, Adri, su papá, Raúl. Su familia lo adoraba, él nunca estuvo solo”, comentó.
“Hablé por teléfono con él el jueves, de hecho habíamos pautado porque iba a venir a casa a quedarse a dormir para estar con el gordo. Me dijo ‘no voy porque estoy triste, no quiero que me vea así porque él siempre vio a su papá fuerte. Dame tiempo para reponerme’. Él se había comprado un auto porque con este tema de las drogas había perdido todo. Evidentemente, de la depresión que tuvo no pudo salir. Con su hijo era un divino. Quiero cuidar y limpiar su imagen porque él estaba enfermo, no era una mala persona. Va a seguir siendo el papá de mi hijo y está en el corazón de nosotros”, concluyó la mujer, visiblemente quebrada de dolor.