Tras haberse desprendido de los derechos de autor de su obra en un acuerdo estimado en más de 300 millones de dólares con Universal, Bob Dylan vendió ahora a Sony Music Entertaiment todo el catálogo de su música grabada en una transacción que habría rondado los 200 millones de dólares.
Así lo anunció la propia compañía a través de un comunicado de prensa, en el que aclara que también adquirió "los derechos de múltiples nuevos futuros lanzamientos".
Aunque no trascendió oficialmente la cifra del acuerdo, algunos medios especializados, entre ellos Billboard y Variety, estipulan que la transacción habría rondado los 200 millones de dólares.
"Estamos sumamente orgullosos de seguir creciendo y desarrollando nuestra relación de 60 años", manifestó el presidente de Sony Music Group, Rob Stringer.
"Estoy contento de que todas mis grabaciones se puedan quedar ahí donde pertenecen", dijo, por su parte, el icónico artista ganador del Premio Nobel de Literatura 2016.
Cabe recordar que Dylan mantiene una relación con el sello desde que en 1961 firmó con Columbia Records, perteneciente a Sony, su primer contrato de grabación.
A finales de 2020, el artista había vendido los derechos de autor a Universal, por lo que esta compañía percibe todas las ganancias por el uso de las canciones del músico.
En este caso, con la venta de la música grabada, Sony se reserva el derecho a hacer futuras ediciones con las cintas existentes.
Dylan es uno de los tantos artistas que han optado en los últimos tiempos por desprenderse de su catálogo por una cifra millonaria. Entre ellos, destacan Bruce Springsteen, Paul Simon y Red Hot Chili Peppers.
Fuente: Télam