Angie Pereyra fue una de las afortunadas en tener la oportunidad de entrar a Gran Hermano 2015, luego de que todos los participantes seleccionados ya habían ingresado al reality. Y pese a que su objetivo es cumplir el sueño de ayudar a su familia, su paso por la casa le está significando atravesar grandes sacrificios.
"Me siento muy culpable porque soy vegetariana. Desde que entré acá, la carne es lo único que hay y no le quiero decir que a mí me preparen otra comida, porque no me siento como para decirles esas cosas. Prefiero dormir que ir a comer".
La joven de 21 años, oriunda de Paraguay, que vive en la villa 31, no está pasando por un buen momento y decidió descargar su angustia en el confesionario: "Me siento muy culpable porque soy vegetariana. Desde que entré acá, la carne es lo único que hay y no quiero decir que me preparen otra comida, porque no me siento como para decirles esas cosas. Prefiero dormir que ir a comer", relató, entre lágrimas.
Por su parte, Maipi –quien también es vegetariana- sintió empatía por su compañera: “Ahora ya somos dos. Que nuestra plata la usen para verduras, nada más… y sólo para nosotras”, expresó.
Mientras que Nicolás, lejos de mostrarse comprensivo, compartió su contundente análisis de la situación: "Has entrado en un lugar que sabías como iba a ser. Esto provoca peleas, discusiones, es una guerra la comida", resumió.
¡Siguen los conflictos con la comida en la casa de Gran Hermano 2015!