Llegó con timidez, pero con la ventaja de saber que el público la había elegido para que fuera parte de la casa más famosa. Angie, la última concursante en ingresar a Gran Hermano 2015, recibió una muestra de los niveles de excitación que hoy tienen los participantes, producto de la abstinencia sexual.
En la fiesta de los viernes, con temática invernal, la joven de 21 años repartió piquitos por doquier. Primero, fue el excéntrico Mariano quién recibió el suyo y luego fue el turno de Eloy. Y a pesar de estar hoy en veredas opuestas por el corazón de Brian, también hubo beso con Marian, la "hermanita" más osada del reality y con Belén, la sensual morocha que fue azafata de A todo o nada.
Sin embargo, Mariano fue por más y como si se tratara de un stripper, en plena fiesta, bailó para Angie y le dedicó sugestivos movimientos que la chica celebró con risas y algún chirlo en la cola del cordobés.
Gran Hermano sigue tomando (aún más) calor.