La explosiva participación de L-Gante en La mañana con Moria dejó una de las escenas más comentadas del día. El cantante, que repasaba los chispazos que tuvo con Wanda Nara tras la ruptura, terminó arrinconado por Moria Casán cuando la conductora lo enfrentó directamente sobre el supuesto romance oculto con la China Suárez.
En medio de la charla, el músico describía cómo la relación con Wanda se había vuelto insostenible. Contó que “la convivencia estaba cargada de conflictos externos” y que ambos ya tomaban distancia cada vez con más frecuencia.
Recordó también un viaje: ella lo acompañó a Mallorca, luego estuvieron juntos en Milán y planeaban continuar hacia Ibiza. Pero una fuerte discusión los dejó en caminos separados: “Ella se quedó en Milán y yo seguí para Ibiza”, sintetizó.
Ese fue el pie perfecto para que Moria disparara sin filtros: “No me contaste el cuerno que le metiste… ¿Cuál fue la deslealtad de la que ella hablaba? ¿La canción con la China?”, insistió la conductora, siempre punzante.

L-Gante intentó esquivar la emboscada. Dijo que no revelaría detalles y deslizó que la relación con Wanda funcionaba en un ida y vuelta complicado: “A veces dejás una puerta abierta y después no te podés quejar. Estamos a mano”, lanzó, dejando más dudas que certezas.
L-GANTE Y SU RELACIÓN SECRETA CON LA CHINA SUÁREZ
Moria, lejos de soltar el tema, profundizó. Habló de vínculos “libres pero no declarados” y del juego peligroso de medir quién da el golpe más fuerte. El músico, por su parte, aseguró que en la actualidad ambos mantienen una paz armada: “Hoy estamos a mano. No hay que competir, y menos entre pareja”.

Pero la tensión real llegó cuando la producción puso en pantalla una imagen de él con la China Suárez. Moria no perdió tiempo: “¿Pasó algo con la Chinita? ¿Te gusta? ¿Por qué la elegiste?”, lo apretó con ironía.
L-Gante respondió que solo se trataba de trabajo: “Profesionalmente, nada más”. Sin embargo, la conductora lo chicaneó: “Profesionalmente te gusta…”. El cantante, incómodo, pidió piedad: “No me quemés, no me quemés”.
Casán, entre divertida y filosa, concluyó que “algo pasó”, aunque él volvió a negarlo: “Nada. Te lo aseguro. Solo laburo”. Aun así, Moria remató con su intuición: “No te creo. Sos demasiado caballero y cuidadoso con las mujeres como para mandar al frente a alguien”.




