La Justicia Federal volvió a poner el foco en el universo del entretenimiento digital. La jueza que condenó al influencer Marcos Ernesto “Yao” Cabrera —quien cumple cuatro años de prisión en el Complejo Penitenciario de Bouwer— amplió la investigación por lavado de activos y ya son más de 100 influencers los que quedaron bajo la lupa.La causa avanza “con velocidad inusual” debido al volumen de pruebas financieras, testimoniales y peritajes contables acumulados en los últimos meses.
El caso Yao Cabrera: una condena histórica por delitos gravísimos
Hace 18 meses, Cabrera fue detenido en Córdoba tras la ratificación de su condena por parte de la Cámara Federal de Casación Penal.Los delitos que se le adjudicaron son de extrema gravedad:
- Trata de personas con fines de explotación sexual y laboral
- Reducción a la servidumbre
- Corrupción de menores
La estructura criminal operaba bajo el nombre VIRAL/WIFI, organización conocida por su presencia masiva en redes sociales, eventos y streamings con audiencias compuestas mayoritariamente por menores de entre 5 y 15 años.Con más de 35 millones de seguidores, la influencia digital de Cabrera amplificó el impacto del caso y expuso la vulnerabilidad de miles de niños y adolescentes en plataformas sin regulaciones efectivas.
La ampliación de la investigación: lavado de dinero, evasión y maniobras financieras sospechosas
La jueza Nada Flores Vega, del Tribunal Oral Federal N.º 3 de San Martín, habilitó la ampliación del expediente de la Causa N° 10007/20, orientada ahora a detectar maniobras de lavado de activos, ocultamiento de bienes, evasión fiscal y captación de dinero no declarado por parte de creadores de contenido vinculados al universo VIRAL/WIFI.
Entre los nombres bajo investigación se encuentran:
- Candela Díaz
- Kevin Macri
- Diego Llamazares
- Irupe Cabrera
- Matías Cabrera
- Ulises Magic
- Juan Pablo Torres Barbot
- Javi Ayul
- Fabri Lemos…y decenas de influencers más que elevarían la lista a más de 100 integrantes del segmento infanto–juvenil.
Según trascendió en ámbitos judiciales, se detectaron:
- Transferencias circulares sin justificación
- Pagos en efectivo no bancarizados
- Compras de autos de alta gama e inmuebles a nombre de terceros
- Contratos publicitarios sin documentación
- Uso irregular de billeteras digitales para captar ingresos de menores
Peritos de PROCELAC analizan más de 60.000 movimientos electrónicos recopilados desde 2020, coincidentes con el funcionamiento de la “Mansión WIFI”, lugar donde, según la Justicia, ocurrieron abusos sexuales, corrupción de menores y consumo de estupefacientes durante la pandemia.
El origen de la causa: denuncias, víctimas y la visibilidad mediática
La investigación se activó tras la denuncia pública del manager Jorge Zonzini en 2020, respaldada luego por víctimas directas como Mariano Fernández y Giovana De Mitole, quienes describieron presiones, explotación laboral, abuso sexual, amenazas digitales y extorsión para ocultar pruebas.
Los dispositivos secuestrados en el allanamiento realizado por Prefectura y Gendarmería resultaron claves para exponer una estructura delictiva mucho más compleja que la imaginada inicialmente.
Una red digital millonaria que trasciende a Yao Cabrera
Para los investigadores, el caso dejó de centrarse únicamente en Cabrera y apunta ahora a una estructura profesionalizada que administraba un flujo millonario sin registro fiscal, generado a través de:
- Publicidad no declarada
- Streams con donaciones
- Venta de merchandising
- Eventos presenciales
- Actividades pagas dirigidas a menores
- Contratos privados con marcas sin control impositivo
La Justicia solicitó información a plataformas tecnológicas internacionales, bancos, fintech y empresas de marketing digital para reconstruir el entramado económico.
Réplicas y tensiones: qué dicen los abogados
Los abogados defensores calificaron la investigación como “excesiva” y un “hostigamiento mediático-judicial contra simples creadores de contenido”.Sin embargo, fuentes judiciales descartan esa lectura: los movimientos patrimoniales no coinciden con los ingresos declarados y constituyen un patrón típico en causas de lavado.
Un caso que podría marcar un precedente en América Latina
Con la condena firme y la causa de lavado en plena expansión, los fiscales anticipan que podrían surgir:
- Nuevas imputaciones
- Embargos preventivos
- Incautación de bienes
- Medidas cautelares contra influencers aún anónimos
El caso ya se perfila como uno de los más relevantes de la región en materia de delitos cometidos por estructuras digitales, especialmente aquellas que captan audiencias infantiles masivas.
Un llamado urgente a regular el mundo digital
La causa expone una problemática creciente: la falta de regulación efectiva sobre influencers con enorme poder de alcance y una audiencia vulnerable de menores.La combinación de encierro, fanatismo digital, ausencia de controles y relaciones laborales difusas generó un entorno propicio para abusos, explotación y manipulación.
El avance judicial podría marcar un antes y un después en la relación entre el ecosistema digital, la protección de la niñez y la responsabilidad penal de los creadores de contenido.



