"¡Lo voy a extrañar muchísimo! Me quedé con ganas de amigarnos y despedirnos como nos merecíamos".
El último gran amor de Gerardo Sofovich tiene nombre y apellido: Sofía Oleksak (39), una joven modelo que supo ser su secretaria en La Noche del Domingo y con quien se casó en 2009, tras siete años de relación. Pero el matrimonio fue intenso... y brevísimo, con un divorcio sellado en 2010.
A pesar de varios intentos por recomponer la pareja, Sofía y Gerardo no lograron volver a perdurar como pareja y, en más de una oportunidad, se enfrentaron escandalosamente en los medios. Pero la noticia de la muerte de Sofovich dejó en el pasado cualquier rencor, y Oleksak no esconde su enorme tristeza.
El domingo, día en que Gerardo falleció, Sofía decidió resguardarse, excusándose de hablar. Pero al día siguiente, dialogó con Ciudad.com y expresó todo su dolor: “Ayer estaba en shock. Trabajé desde mis 16 años con él, me vio crecer, casarme, mis embarazos y hasta mi primer divorcio. Luego, estuvimos juntos por siete años y a la cuarta vez que me propuso matrimonio, acepté pensando que iba a ser para siempre. Pero las cosas fueron cambiando y nos fuimos equivocando en las formas. Desde 2013 no teníamos contacto, yo tomé distancia. La única verdad es que siempre nos quisimos y por eso intentamos volver cuatro veces, aún estando divorciados. ¡Lo voy a extrañar muchísimo! Me quedé con ganas de amigarnos y despedirnos como nos merecíamos”.
¿Por qué no fue al velatorio? "No me gusta le exposición y él ya no está. Me gusta despedirme cara a cara... o en su momento lo visitaré (se quiebra)... Va a estar cerca de mi casa. Nos vamos a ver seguido".
“Él sabe que yo lo amaba y yo sé que él me amaba también. Ya con eso nada está pendiente, nada más nos faltó una última sonrisa juntos. El recuerdo es todo, es muy extenso todo lo que tengo para hablar de él. En definitiva, yo sé que él me amaba y yo lo amo. Las cosas no se terminan bien en las formas, pero lo importante es que los dos nos queríamos mucho”, reveló con emoción.
Sofía contó por qué no fue al velatorio de su exmarido en la Legislatura porteña y tampoco irá al entierro: “Primero, no me gusta le exposición. Segundo, él ya no está. Eso es más artificial que cualquier otra cosa. A mí me gusta despedirme cara a cara... o en su momento lo visitaré (se quiebra)... Va a estar cerca de mi casa. Nos vamos a ver seguido”, expresó entre lágrimas una de las personas a las que más amó Gerardo y que hoy decide rendirle homenaje con estas palabras.