Liv Tyler partió con su madre, su hijo Milo Langdom, y su novio, el manager de futbolistas Dave Gardner, rumbo a una isla europea para descansar y disfrutar del paradisíaco lugar.
Allí la actriz y modelo estadounidense se relajó e hizo una vida natural, sin contemplar la presencia de los ávidos fotógrafos que la retrataron en el momento justo que regresaba a su yate con la parte inferior del bikini bajo, ¡dejando escapar su cola!
Lo curioso fue que Liv se introdujo al mar usando remera y al regresar a la superficie se envolvió rápidamente con un toallón, evitando exponerse al sol. De hecho, su piel se conservó extremadamente blanca.
Pese al descuido, la hija del músico Steven Tyler lució espléndida, en compañía de sus afectos. Incluso, en dicha estadía fue frecuentada por la modelo Kate Moss.
¡Mirá las fotos!