“Pedí en las iglesias y en todos lados que cuando llegue una nenita, me avisaran que yo la adoptaba. Un día me avisan que hay una nenita en un hospital, que había nacido hace tres horas y me dijeron algo que me indignó: 'Mire que es morochita, eh'”.
Durante una entrevista con Baby Etchecopar en El Angel de la Medianoche (C5N), la actriz Haydée Padilla (77) -famosa por su papel de La Chona- hizo una muy polémica revelación, al contar que hace 38 años (en 1975) adoptó a una hija cuyo origen aún es desconocido, junto a quien era su pareja, el fallecido dramaturgo Sergio De Cecco.
La charla se metió en esos cauces cuando, al volver de una pausa, se vio a Etchecopar y Padilla hablando distendidamente y -sin aclarar que habían regresado del corte- el conductor siguió conversando con su entrevistada (ver comienzo del video). Incluso se vio a la actriz dirigir su mirada atrás de cámara, como si un productor hubiera hecho una seña. Un minuto más tarde, Baby le preguntó si tenía hijos. Entonces Padilla le dijo que era madre de una hija adoptada. Pero al contar los detalles de la adopción, no sabía que estaba al aire.
“Tengo una hija adoptiva, vive en Mar del Plata con sus dos hijos, se llama María Laura De Cecco. Ella es la heredera de De Cecco. Ella me ayuda en el afecto y yo la quiero mucho a ella. Así chiquitita vino a mi casa”, comenzó relatando.
"Era ochomesina, ella no quiso saber nunca si era de desaparecidos... Yo en realidad la puse en mi libreta, algo ilegal", agregó Padilla. Cuando Etchecopar le avisó que estaban al aire, la actriz atinó a decir: "Ah, ¿si? Quiero decir que lo hice absolutamente de corazón, para asegurarla y que tuviera la libreta”.
Luego se metió de lleno en la llegada de la beba a su hogar: “Yo había pedido adoptar, porque tenía pérdidas. Pedí en las iglesias y en todos lados que cuando llegue una nenita, me avisaran que yo la adoptaba. Y un día estaba por ir a ensayar El Gran Deschave (N de la R: esa obra se estrenó en agosto de 1975) y sonaba el teléfono. Cuando atiendo, me avisan que hay una nenita en un hospital, que había nacido hace tres horas y me dijeron algo que me indignó: 'Mire que es morochita, eh'”.
Etchecopar le preguntó cómo siguió el proceso. “Esperé a que viniera, De Cecco la fue a buscar. Era ochomesina, ella no quiso saber nunca si era de desaparecidos... nada...”, agregó sobre la voluntad de su hija. “Yo en realidad la puse en mi libreta, listo. Es algo ilegal. Ella sabe todo. Yo lo hice y no se me ocurrió que era ilegal”, continuó.
Frente a la consulta de Baby sobre si no era mejor hacer un ADN, la actriz repitió "Laura no quiere”. Y agregó: “Tenía adoración por su papá, De Cecco. Y conmigo también. Nos amamos”.
El relato se metió en otro tema delicado, su relación con Federico Luppi: “Yo no fui al ensayo y la bestia peluda me dijo: ‘¿por qué no me adoptás a mí?’”.
Con la “bestia peluda” se refería a Luppi. En ese momento, De Cecco era director de la obra que estaban ensayando y había elegido al actor y a su mujer para formar parte del elenco. Padilla luego se puso en pareja con Luppi e incluso la prensa de la época indicó que ella había dejado a su esposo por el actor. En noviembre de 1986, a los 55 años de edad, De Cecco se suicidó.
Consultada por su confesión, Padilla afirmó en diálogo con Ciudad.com: "No me arrepiento de haberlo contado, hablé con naturalidad, sin ningún prejuicio, pero es un tema que no quiero que siga teniendo vigencia".
La actriz contó que Luppi sabía de esta adopción pero que nunca lo reportó a Hebe de Bonafini, fundadora de Madres de Plaza de Mayo. “Yo tengo una idea de cómo viene la cosa, pero es improbable… Yo la puse en mi libreta… Esto es un secreto”, afirmó Padilla, haciendo el gesto como que esa información tenía que quedar entre ella y el conductor. En ese momento, Etchecopar le avisó que estaban en el aire y ella, luego de la sorpresa ("¿ah, sí?", atinó a decir), hizo una aclaración: “Quiero decir que lo hice con Sergio absolutamente de corazón, para asegurarla y que tuviera la libreta”. Tras eso, el conductor cambió abruptamente de tema.
SU DESCARGO TRAS LA POLÉMICA CONFESIÓN
Consultada sobre el tema, Padilla aseguró en diálogo con Ciudad.com: “No me arrepiento de haberlo contado, pero es un tema que no quiero que siga teniendo vigencia. Fue un reportaje como otro más, hablé de otras cosas también. Yo hablé con naturalidad sin ningún prejuicio. Hay que tener respeto por la inocencia de cada uno, no se trataba de hacerle daño a nadie, al revés”.