El periodista repreguntó: “¿Y antes de Marina, para qué se levantaba una mano?”. Entonces, Rial deslizó: “Para otra cosa, imaginate… Mis hijas y yo lo sabemos bien…”
Mientras disfruta de unas soñadas vacaciones en Italia junto a Mariana Antoniale (24) y sus hijas, Rocío (13) y Morena (14); Jorge Rial (51) le brindó una entrevista a la revista Gente. Y al contar cómo le cambió la vida su novia, lanzó una frase polémica.
Ocurrió cuando hablaba sobre los aspectos más positivos de salir con Loly, a quien dobla en edad: “Es bárbaro, porque antes yo vivía sin amor, y ahora vivo con amor. Mi vida es una fiesta junto a Mariana. Vienen sus amigas, me integro a ellas y ellas a mí. Su familia es maravillosa, divertida, alegre, cariñosa. Ella trajo amor donde no lo había. Ahora mis hijas ven que se levanta la mano para una caricia…”.
Ante semejante declaración, el periodista repreguntó: “¿Y antes de Marina, para qué se levantaba una mano?”. Entonces, Rial deslizó: “Para otra cosa, imaginate… Mis hijas y yo lo sabemos bien…”. Y agregó: “Yo ya pensaba que no podía enamorar a nadie. Me equivoqué. Estoy feliz y lo digo: si tengo que morir (ojalá sea dentro de mucho…), que sea en los brazos de Mariana.
“No me preocupa que Rocío y Morena no vean a la madre. Mis hijas saben por qué no la ven. Parece que del lado de la madre no hay muchas ganas. Será que cada uno tiene que vivir con sus demonios”.
Al referirse a su divorcio de Silvia D'Auro, el conductor aseguró: “Hice todo lo posible para que se arregle de una vez por todas. Creo que no va a faltar mucho. Aunque a veces hay que tener una coraza y los hue... de acero para soportar muchas cosas en estos trámites. Menos mal que la tengo a Mariana, porque viví momentos bravos. Mis hijas también me demostraron el amor que me tienen cuando eligieron vivir conmigo”.
Rial también contestó sobre cómo toma que Morena y Rocío no vean a su mamá: “No me preocupa. Mis hijas saben por qué no la ven. Parece que del lado de la madre no hay muchas ganas. Será que cada uno tiene que vivir con sus demonios”. ¡Tremendo!