"Me separé hace un mes. Estoy sola, pero no pasó nada raro: la relación terminó en buenos términos".
"Soy una persona muy reservada en cuanto a mi vida privada. No me gusta que hablen de mí si no es por mi trabajo. Soy una chica que tiene un muy bajo perfil y trato de guardar mi intimidad, pero a veces es inevitable y hay que aprender a convivir con ello".
La declaración es de noviembre de 2012, mientras Mercedes Oviedo (29) hacía las valijas para irse a vivir a Agen, Francia, junto a su -por ese entonces- novio, Miguel Boris Avramovic (31), rugbier argentino que juega en el Sporting Union Agen galo. Pero esas mismas palabras se repiten hoy, domingo 2 de junio, cuando la bella actriz atiende el llamado de Ciudad.com.
"Cuando me fui a Francia, no dije que dejaba mi carrera, aunque salió así en los medios. Simplemente me fui un tiempo para acompañar a quien era mi pareja, pero sabía que iba a volver en mayo porque tenía proyectos laborales".
La pregunta, incómoda, es sobre su situación sentimental, luego de que la ex Dulce Amor y Todos contra Juan volviera a la Argentina, tras cinco meses en tierra francesa, en los que compartió fotos de su estadía vía Twitter e Instagram. "Me separé hace un mes. Estoy sola, pero no pasó nada raro: la relación terminó en buenos términos", explica sin vueltas Mercedes, quien llevaba dos años de relación con Avramovic. Y aclara: "Cuando me fui a Francia, no dije que dejaba mi carrera, aunque salió así en los medios. Tengo 29 años y amo mi profesión, nunca se me pasó por la cabeza largar todo. Simplemente me fui un tiempo para acompañar a quien era mi pareja, pero sabía que iba a volver en mayo porque tenía proyectos laborales". El archivo no miente: en abril ella había tuiteado que tenía programado venir a Buenos Aires.
Aunque aún no puede adelantar de qué se tratan esos proyectos en los que figura, Oviedo comenta que está "entusiasmada y contenta" por la posibilidad de volver en breve a la actuación, su gran amor. Después del amor.